miércoles, 17 de octubre de 2007

Preguntas retóricas periodistas deportivos (341-350)

Para pensar, meditar y reflexionar...

341) ¿Mariano Closs no es más odioso, agrandado, pedante, engreído y petulante que el ex tenista chileno Marcelo Chino Ríos?

342) ¿Cómo se hace para defender que el fútbol es un juego alegre y divertido, si sus comentaristas tienen las caras y los rictus de Alejandro Fabbri, Juan Yanquilevich, Martín Líberman o Walter Safarián?

343) ¿Qué es peor en Lito Pintos: su ignorancia, su desconocimiento, su ordinariez, sus bravuconadas, sus errores, sus horrores, su poco profesionalismo, su desgano, su poco apego por la verdad, que se considere periodista sin serlo, que cobre por hacer lo que hace en los medios, que no sepa nada de fútbol ni de ningún otro deporte, que se la pase mandando chivos, que se crea el más hombre por vivir denigrando a las mujeres, que se venda al mejor postor, que sea barrabrava, que sea facho y gorila, que esté a favor de la mano dura y la represión, que no sepa nada de política y que opine igual, que sea un servil y sumiso empleado del mafioso de Hadad, que sea menemista o que simplemente se jacte de todo eso todo el tiempo?

344) ¿Julián Weich no parece un tipo pícaro, zarpado y políticamente incorrecto al lado de Gastón Recondo?

345) ¿Para cuando la publicidad con Bilardo diciendo “Para mi copa o mi bidón, nada de vomitivo ni de champagne, señorita, yo ahora tomo Gatoreit”?

346) ¿No es increíble y hasta admirable que con esa (escasa) capacidad de análisis, ese (nulo) criterio periodístico y ese vocabulario de primer grado, Quique Felman haya desarrollado esa tremenda autoestima y ese desmesurado ego?

347) ¿Qué es más ridículo en Marcelo Palacios: su constante necesidad de mostrar, tocar y mimar a su diminuto celular, que emulando a Quique Wolf conduzca “Estudio Fútbol” con una pelota en sus manos, que siga diciendo que sigue siendo un tipo de barrio o que cuente al aire los entretelones de como consigue todas y cada una de las notas que hace, como si a la gente le importara más esas internas de producción que la palabra de los verdaderos protagonistas?

348) ¿Es necesario que Pablo González en “Sin Cassette” quiera demostrar a cámara su (dudoso) talento para jugar a la pelota con el entrevistado de turno, en vez de dejar eso para cuando va a jugar al fútbol con sus amigos o compañeros de trabajo?

349) ¿Debido al aspecto físico del conductor Fernando Niembro, el programa “La Última Palabra” no debería llamarse “La Última Papada”?

350) ¿Quiénes son más cambiantes, variables, volubles, inestables, panqueques y veletas: los hinchas de fútbol, los políticos, la clase media o los periodistas deportivos?

No hay comentarios: