Para pensar, meditar y reflexionar...
991) ¿No es gracioso como desde ADEPA (Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas) dos por tres se quejen de supuestos actos de censura y principalmente de ciertas multas, condiciones, condicionamientos y restricciones a los medios de comunicación privados, pero que no se escandalicen, ni se indignen, ni protesten airadamente, y ni siquiera digan ni mu de la indigna Ley de Radiodifusión hecha durante la dictadura que rige hasta la actualidad?
992) ¿Viendo tantos programas sobre la nada, tanta repetición continua de la nada, tanta reproducción permanente de la nada, tantas teorías, hipótesis y conclusiones sobre la nada, y tantos debates sobre la nada, no se extraña la honda espesura y la sencilla profundidad de “ABL”?
993) ¿Desde cuando el género “monologo” pasó a ser considerado “stand up”?
994) ¿No es curioso que las “figuras”, “estrellas” y “divas” que son presentadas como queridas ídolas populares en realidad son millonarias que viven en su burbuja, que tienen bastante de fachas, reaccionarias, chetas y oligarcas y que más bien reniegan de lo popular?
995) ¿No es lamentable como a ciertos periodistas y comunicadores les preocupan más los piquetes, los cortes de calles, avenidas, autopistas, rutas, puentes y el caos en el tránsito que no los dejan llegar a tiempo al canal desde el country que en un país de 30 millones de habitantes potencialmente rico como este que produce alimentos para 300 millones de personas haya gente que se muere de hambre?
996) ¿No pareciera ser que en la televisión vernácula parecen confundir experimental con absurda, conceptual con aburrida, elaborada con inexplicable, sencilla con berreta, glamorosa con elitista, alternativa con trucha, undergraund con inentendible, rebelde con guasa, transgresora con guaranga, sencilla con ordinaria, popular con grasa y bizarra con basura?
997) ¿Los reidores en vivo son a los conductores modernos lo que las risas grabadas fueron a los humoristas de antaño?
998) ¿No pareciera que en la televisión argentina muchos confunden hacer un bolo con hacer una bolo-dez?
999) ¿No es sospechoso que habiendo supuestamente tanta prensa libre, independiente, pluralista, democrática y constitucionalista que todo lo investigan, denuncian y destapan, que nadie se anime a preguntarse seriamente porque el Vaticano y la Iglesia Católica Apostólica Romana tienen tanto poder y ejercen tanto lobby para parar, detener y boicotear los avances científicos, las leyes de salud reproductiva, las leyes de procreación responsable, las leyes de despenalización del aborto, la universalización y promoción en el uso del preservativo y la libertad de culto y de enseñanza pública, laica y gratuita entre otras cruzadas inquisitivas pero hagan tan poco para parar las injusticias, las guerras, el hambre, la pobreza, la indigencia, la desnutrición, la desigualdad, la inequidad, la corrupción, la delincuencia de guante blanco, los golpes de Estado, las dictaduras, las invasiones, la esclavitud y los abusos de poder?
1000) ¿A esta altura no habría que aclararle a la gente que el cuarto poder no es la prensa, ni el periodismo, ni siquiera los periodistas sino que el cuarto poder lo detentan los propietarios y accionistas de los medios de comunicación privados y que en todo caso muchos comunicadores se las rebuscan valientemente en caminos alternativos y fuera del sistema; otros muchos se las ingenian desde adentro buscando grietas por donde filtrar sus ideas; otros muchos se plantaron firmes y siguen siendo ejemplos en pensamiento y acción de dignidad laboral, honestidad profesional, capacidad intelectual, ética periodística e integridad humana; otros muchos se mantuvieron con la frente en alto, de pie y nunca de rodillas ante los aprietes, la extorsión y la opresión; otros muchos resisten como pueden; otros muchos fueron víctimas de la desregulación y la flexibilización laboral; otros muchos se metamorfosearon para sobrevivir en la ley de la selva con el cuchillo entre los dientes y el serrucho en una mano; otros muchos se agacharon, se acomodaron y se aburguesaron; otros muchos señalaron, se mantuvieron y luego ascendieron; otros muchos se refugiaron en la cobardía, la obsecuencia y la genuflexión; otros muchos son cómplices convencidos y partícipes necesarios y otros muchos solo son mensajeros a sueldo que reproducen servilmente los mensajes, el pensamiento único y el discurso dominante que les bajan sus dueños desde arriba?
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